Mexico. 27/Octubre/2025
El director general de Pemex, Víctor Rodríguez, explicó que la compañía ha pagado 300 000 millones de pesos (unos 16 300 millones de dólares) a proveedores hasta septiembre de este año, utilizando un vehículo financiero especial creado para sanear las cuentas pendientes.
“Hemos pagado la deuda financiera heredada en tiempo y forma. Los montos adeudados a proveedores se han reducido a la mitad”, señaló Rodríguez durante su comparecencia. El funcionario agregó que solo la semana pasada se realizaron pagos por 26 000 millones de pesos, y se prevé cubrir otros 116 000 millones en diciembre, como parte del cierre fiscal del ejercicio 2025.

Producción, refinación y estrategia energética
Pemex, considerada una de las compañías petroleras más endeudadas del mundo, mantiene una deuda financiera cercana a los 85 000 millones de dólares, tras una reciente recompra de bonos por 12 000 millones.
Rodríguez detalló que la empresa busca mantener su producción entre 1.6 y 1.7 millones de barriles diarios, enfrentando una caída mensual de aproximadamente 30 000 barriles debido al agotamiento natural de algunos campos y a la falta de grandes descubrimientos recientes. La estrategia de Pemex prioriza procesar más crudo en el país y depender menos de las exportaciones. Actualmente, la petrolera procesa 1.4 millones de barriles diarios en sus siete refinerías, incluyendo la refinería Olmeca en Tabasco, que ya alcanza una capacidad de 230 000 barriles diarios y planea aumentar hasta 320 000.
En tanto, la refinería de Deer Park, en Texas, propiedad de Pemex, se encuentra en mantenimiento, pero se espera que eleve su producción de 280 000 a 310 000 barriles diarios una vez finalizadas las obras. Desde la administración anterior, el gobierno federal ha otorgado inyecciones multimillonarias de capital y reducciones de deuda a la petrolera para garantizar su operatividad y recuperar su capacidad productiva.
Perspectiva económica
Analistas consideran que la reducción de deuda a proveedores mejora la posición de liquidez de Pemex y su capacidad para negociar mejores términos financieros con inversionistas, aunque advierten que el reto estructural sigue siendo su deuda global y la dependencia de los subsidios federales.
La administración Sheinbaum ha insistido en que Pemex debe transformarse en un actor clave de la transición energética, sin abandonar su papel estratégico en la economía mexicana.


