MÉXICO, 28 DE JULIO DEL 2025
Un nuevo estudio publicado en Nature Medicine analizó datos longitudinales de más de 170.000 personas en 33 países occidentales, con más de 420.000 evaluaciones cognitivas e imágenes cerebrales, y concluyó que, aunque las personas con niveles educativos más altos empezaban con mayor función cognitiva, no presentaron un deterioro cognitivo más lento con la edad.

Los individuos con educación superior mostraron mejor memoria y mayor volumen intracraneal, pero al envejecer su estructura cerebral se redujo al mismo ritmo que en personas con menor educación.
Investigadores del Instituto Guttmann y la Universidad de Barcelona señalaron que los rasgos neurológicos individuales podrían predisponer tanto al nivel educativo como al estado cognitivo inicial, no necesariamente al envejecimiento más lento.
Este hallazgo supone un quiebre en el entendimiento popular: más educación no siempre resulta en un envejecimiento cerebral más lento. El futuro de la prevención debe enfocarse en políticas de salud cerebral integral a lo largo de toda la vida, no solo en la escolaridad.